Sunday 14 de June de 2009, 19:25:37

De nuevo a las andadas...

Pie de Vía:

Tacul, Maudit, Montblanc.

Por alguna razón, casi siempre , queremos dar un paso adelante, incluso de manera irracional,
quizá fruto de nuestra ambición ó posiblemente por estar inmersos en este juego neurotico
de darnos satisfacción desafiando a la naturaleza.
En la ultima salida que realicé al Salvaguardia pasé junto a la canal donde un alud sorprendió a
una persona esta temporada, con el resultado que todos conocemos, es mucho el dolor que se
esparce como una plaga sobre familiares, amigos y amantes de la montaña en general,
posiblemente yo tambien hubiera tirado por aquella pala directa hacia el objetivo, ya sea por
desconocimiento o por el deseo irrefrenable al desafio.

Esto es solo un referente para poner sobre la mesa la cultura a la que pertenecemos, la que
nos hace entender y en la que estamos acostumbrados a utilizar en el deporte en general y por
que nó, en nuestra vida cotidiana, los terminos "exito y fracaso".
Estoy convencido, que estas dos palabras son engañosas y normalmente están fuera de
nuestro contexto, "el éxito" al que todos asociamos a una conquista, no es mas que una
percepción, una ilusión de nuestro desconocido cerebro, mas aun cuando sabemos que
es un estado circunstancial; el hecho de salir y pasarlo bien independientemente de los logros,
es lo que realmente podemos considerar un "éxito", lo disfrutado es lo que nos invita a volver a salir y continuar con la actividad elegida.
Respecto al "fracaso", despues de lo expuesto, queda claro que el origen es similar, salvo con una excepción, lo único que me parece un "fracaso", es perder la vida en el empeño.

 
Boca del tunel, luego la cresta.

Primer Largo:

Un verano cualquiera, Esteban, Berni y yo, decidimos ir al Montblanc a probar suerte, en
nuestras mentes estaban el Tacul e incluso el Maudit, pero sobre todo el espectaculo de cimas
y glaciares ya observable desde la Aiguille du Midi. Nos tomamos una semana y transportados a Chamonix por una California T3, nos dejamos caer justo en el aparcamiento del aéreo.
Allí pernoctamos varios días, hacia mal tiempo y la demora propició una convivencia un poco tensa.
Ya estabamos artos de la espera y de los paseos por la citada población, llena de turistas, tiendas
de deportes etc. Esto nos llevó a tomar una decisión que no se como calificar por lo que ocurrió
despues, creo que era el cuarto día cuando la meteo nos da una apertura para el día siguiente
con un horario muy preciso de buen tiempo, que finalizaba el mismo día, despues bajas presiones
 y el temporal añadido, la semana se perdia y no teniamos otra opción que la de subir,
(el aéreo había estado fuera de servicio para el público esos días).

A primera hora ya estábamos en la taquilla con nuestros baúles acuestas y con todo el material
de pernocta incluido, se trataba de llegar a esos 3800m. y realizar cientos de fotos con un día
esplendido, de un paisaje dificil de olvidar, despues de pasarnos un par de horas alucinando,
decidimos que ya era hora de atravesar el túnel que te lleva al principio de la cresta, que por cierto
el temporal se habia encargado de afilar, era cuestión de descender los 200m. que te llevan al Plató, entre La Vallee Blanche y el Col du Midi, allí en medio y como testigo el refugio del Cosmiques plantamos la tienda. Pasamos la tarde explorando los alrededores, metiendonos en algún serac y la
verdad disfrutando de aquel entorno.

La Vallee Blanche

Segundo Largo:

Cae la tarde y el viento epieza a soplar, nos recogemos en nuestro iglú, cenamos alguna cosa
y engullidos por los sacos tratamos de dormir y estar frescos por la mañana para nuestra ascensión,
a sabiendas que el temporal ya se había iniciado. La velocidad del viento era tal, que el techo oval de la tienda nos aplastaba continuamente, realmente la cosa se estaba poniendo muy cruda, yo que
sufro mal de altura en el Tibidabo, je je je empecé a ponerme malisimo, tenía que beber continuamente y mear, pero cualquiera salia del saco y se iba fuera a vaciar, prefiero no comentar
la solución a este pequeño problema. Sin pegar ojo en toda la noche, con nauseas y un dolor de cabeza tremendo, vi que aquel no iba aser un gran día, necesitaba salir de allí lo antes posible.
Mientras nos preparabamos oímos el crujir de unos pasos en la nieve, una cordada se nos adelantaba, aquello daba cierta esperanza a mis dos compañeros para una intentona.

Estando ko, me quedé junto a la tienda mientras ellos partían hacia el inicio de la rampa del Tacul,
se encontraban a mitad de camino de los seracs, cuando percibí caer objetos al principio de la pala
justo pasado un gran serac, el caso es que me parecieron mochilas y personas (el tiempo era nefasto y esa noche se formaron placas de viento), cinco minutos despues aparecieron dos helicópteros "torpedo" realizando unas maniobras acrobaticas, dirigiéndose uno a la zona del accidente y el otro realizó una parada en el Plató, de donde salió un guia que enérgicamente hizo regresar a mis compañeros a la tienda, invitándonos a recoger todo aquello y salir de alli lo antes posible, bajo el brazo portaba un buen mazo de banderines que avazándose utilizó para marcar el camino hacia la arista de salida, ante la falta de visibilidad y el aumento del temporal.

Si no recuerdo mal la Aiguille Verte.

En el paso de la arista nos encordamos, el fuerte viento nos empujaba hacia la vertiente de Chamonix
con un patio impresionante, yo iba de primero mientras atras, por el viento apenas podía escuchar cierto griterio debido a los nervios y al pollo que se estaban haciendo con la cuerda por no dejar margen, hicimos la arista arrastrandonos como gusanos, para no ser enviados al abismo, al fin llegamos al túnel donde se aplacaron las tensiones.
Tomamos sin demora el aéreo que nos esperaba, ya estaba fuera de servicio, el vendaval solo permitia su funcionamiento para emergencias, mientras bajábamos el silencio se apoderó de la cabina, creo que los tres estabamos meditando, tratando de encajar todo lo desmoronado de nuestro interior, el paraiso se convirtio en nuestro infierno particular, y solo nosotros ingenuos aprendimos el significado del "éxito y el fracaso", con el coste añadido.

En busca de la salida.

Una vez en la furgo y de regreso, pusimos la radio y escuchamos la información de los accidentes mortales de la semana, 2 en el Tacul y en total 12 en todo el macizo. No me lo podia creer, pero
informaciones posteriores confirmaba que se habian dado casos de 18 victimas en una semana, quien lo iba a pensar.

Ultimo Largo:

Nos quedaba un día por consumir, así que decidimos acabar lo mejor posible la semana, tomando
dirección Pont St. Espirit para realizar en kayak el descenso integral del Ardeche, 35Km. de espectaculo por un rio caudaloso con algún rápido divertido, con esto acabo nuestro periplo en
los Alpes.

Conclusión:
Volveré, con algo mas de respeto a los pronósticos de la meteo, los Alpes no son los Pirineos.

Álbums de Fotos relacionados:

• TACUL la intención.